¿Qué hacemos?

Conservamos, restauramos y preservamos los ecosistemas fuentes de agua para Quito.

¿Por qué lo hacemos?

Los ecosistemas fuentes de agua son frágiles. En Quito, el agua dulce que consumimos proviene de ellos.

Uno de los ecosistemas únicos que encontramos en la zona ecuatorial de los Andes, son los páramos. Ellos actúan como esponjas naturales, almacenando gran cantidad de agua en la época de lluvia y liberándola lentamente en la temporada seca.

Albergan gran diversidad de especies adaptadas a las condiciones extremas de altitud y desempeñan un rol fundamental en la regulación del clima. Almacenan carbono en sus suelos y vegetación, ayudando a mitigar el cambio climático. Además, nos protegen contra desastres naturales.

La vegetación densa de los páramos ayuda a estabilizar el suelo y a prevenir la erosión. Esto es vital para proteger contra deslizamientos de tierra e inundaciones, especialmente en áreas montañosas propensas a estos eventos.

También cuidamos de los bosques, reservorios naturales de agua dulce.

Son ecosistemas que contribuyen al ciclo del agua. Los árboles absorben agua del suelo y la liberan a través de la transpiración, lo que afecta la humedad de la atmósfera y a la precipitación.

Conservarlos significa trabajar para detener las amenazas como las actividades agrícolas y ganaderas, así como el crecimiento acelerado de las ciudades haca los páramos.

Nuestras acciones

Información hidroclimática, social y ambiental para la toma de decisiones

Generamos datos y estudios físicos, técnicos, geográficos, ambientales y sociales, con los que promovemos la transferencia y aplicación de conocimientos, por parte de nuestro equipo y otros actores que intervienen en nuestra zona de trabajo.

Esta información respalda la toma de decisiones hacia una gestión integrada de los recursos hídricos en la cuenca alta del río Guayllabamba y las unidades hidrográficas que abastecen de agua al Distrito Metropolitano de Quito.

Monitoreo climático

Trabajamos en monitoreos permanentes dentro de nuestra área de intervención, a través de 19 estaciones climáticas automáticas, 12 de ellas cuentan con registros en tiempo real. Gracias a este trabajo contamos con información continua y de calidad sobre el clima en zonas estratégicas, lo que nos ayuda a planificar nuestras acciones y apoyar a la gestión integrada de los recursos hídricos.

Monitoreo hidrológico

Esta línea de acción es prioritaria para conocer la disponibilidad hídrica y verificar los impactos positivos generados por nuestras acciones. Realizamos el monitoreo por medio de 5 estaciones hidrológicas automáticas. El fortalecimiento de esta línea de acción facilita la cooperación con nuestras instituciones aliadas.

Monitoreamos el impacto de nuestras intervenciones

Traducir beneficios hídricos en rentabilidad económica es uno de nuestros más grandes retos y es el eje central de esta línea de acción mediante la cual relacionamos los beneficios hídricos (mantener o mejorar los servicios hídricos) obtenidos o proyectados, con las inversiones realizadas o necesarias para alcanzar dichos beneficios.

Esta información es útil, sobre todo, para las instituciones interesadas en sumarse a la labor que realizamos.

Apoyo a la gobernanza de cuencas

Queremos que diferentes organismos y la sociedad civil se vinculen con el estado de sus recursos hídricos y, juntos, participar en espacios de diálogo a nivel de cuenca para establecer niveles de corresponsabilidad, roles, competencias y atribuciones que aseguren la instauración y sostenibilidad de un sistema de gobernanza participativo. Para esto compartimos la información que generamos a través de nuestras plataformas.

Usos del agua

Nos articulamos con la Autoridad Única del Agua con el fin de mejorar los procedimientos técnicos para el otorgamiento de las autorizaciones de uso y aprovechamiento del agua en las áreas que intervenimos.

Análisis de caudales ecológicos

Conocer el estado ecológico de los ríos y las variaciones de caudal, a través de métodos teóricos y experimentales que permitan mantener los ecosistemas acuáticos y sus funciones ambientales, nos ayuda a reducir los impactos ecológicos y optimizar las captaciones de agua para usos como hidroelectricidad y consumo humano. Hasta el momento hemos realizado estos análisis en las unidades hidrográficas del Pita, San Pedro, Aglla, Papallacta y Chalpi Grande.

Establecemos acuerdos de conservación con propietarios privados y comunitarios

Protegemos diferentes ecosistemas en aproximadamente 20 mil hectáreas que gestionamos, en áreas de interés hídrico del Distrito Metropolitano de Quito. Disminuimos las amenazas presentes en estas zonas mediante acuerdos de conservación con propietarios privados y comunitarios. A estas acciones se suma el trabajo de vigilancia y monitoreo de nuestro equipo de guardapáramos.

Administración, control y vigilancia de predios propios y de la EPMAPS

Contamos con un equipo de más de 25 guardapáramos cuyas capacidades y conocimientos aportan a la gestión de nuestros predios y los que administramos junto a la EPMAPS – Agua de Quito.

Este trabajo se vincula permanentemente con las acciones de organizaciones aliadas y de otros actores e investigadores presentes en estas áreas de conservación hídrica.

Adición de nuevas áreas con fines de protección hídrica

Realizamos prácticas de restauración activa como el enriquecimiento de sitios degradados con especies leñosas arbóreas y arbustivas, dispersión de bombas de semillas de especies herbáceas y arbustivas, incorporación de tapetes de especies herbáceas y restauración de humedales. Además, prácticas de restauración pasiva como el aislamiento de las amenazas en sitio a través de cercas vivas, cercas de alambre de púas y cercas eléctricas. Además, las intervenciones físicas: control de cárcavas, terrazas, entre otros.

Creación de compromisos de conservación y desarrollo comunitario

Apoyamos a las comunidades en la planificación, capacitación y manejo productivo de sus predios y el desarrollo de sistemas agroforestales y silvopastoriles como mecanismo para reducir las amenazas que afectan la disponibilidad, el acceso y la gobernanza del agua sobre el páramo y los espacios endémicos restantes de bosques andinos.

Restauramos páramos degradados y sobrepastoreados

Este trabajo lo realizamos en las áreas de interés hídrico para el Distrito Metropolitano de Quito.

También, investigamos y monitoreamos nuestras actividades en páramos, bosques altoandinos y humedales para proteger las vertientes generadoras de agua de las cuencas hidrográficas.

Con estas acciones buscamos que la cobertura vegetal de estas áreas cambie y el suelo recupere, poco a poco, una a una sus funciones principales: la regulación hídrica.

Recuperación y restauración de cobertura vegetal y suelos en áreas de interés hídrico

Analizamos las oportunidades de adquirir zonas de interés hídrico con el fin de asegurar el agua para toda la población del DMQ, actualmente sumamos aproximadamente 20 mil hectáreas. Con este trabajo proponemos una figura de conservación por interés hídrico que pueda ser reconocida a nivel municipal, nacional y regional.

Investigación en zonas de prioridad para la generación de información sobre los beneficios de las acciones de recuperación vegetal

La investigación en restauración se basa en la comparación de los resultados en términos de humedad del suelo, obtenidos con diferentes técnicas de siembra o de recuperación natural en ecosistemas de páramo y bosques altoandinos. De esta manera comprendemos los impactos de nuestras acciones sobre las propiedades hidrofísicas del suelo, su rendimiento y capacidad de regulación del agua, a escala de parcela y de microcuenca. Esta investigación se complementa con la cuantificación de carbono que permite conocer la capacidad de retención de CO2 que tienen los páramos. Estos datos son de vital importancia para nuestro monitoreo de impacto.

Educamos y sensibilizamos sobre la importancia de los ecosistemas fuentes de agua

Generamos procesos de educación y espacios de sensibilización a través de proyectos y actividades puntuales. Creemos en estos procesos como eje fundamental para lograr un cambio positivo de perspectiva sobre la importancia de las fuentes de agua.

La alta capacidad técnica del equipo humano es nuestra fortaleza. Hemos propuesto y validado una fusión de enfoques y metodologías pedagógicas constructivistas e innovadoras para ofrecer un servicio de calidad a la población beneficiaria.

Buscamos mejorar cada día, para ello, evaluamos constantemente nuestras acciones y realizamos un adecuado manejo adaptativo para generar vínculos de compromiso entre las personas y el ambiente. De esta manera, impulsamos cambios positivos en el cuidado del agua como bien común.

Educación ambiental no formal dirigida a la comunidad educativa

Entre las acciones que realizamos está la ejecución del proyecto de capacitación a docentes de instituciones educativas ubicadas en zonas de interés hídrico, denominado “YakuAulas”. Consiste en una serie de capacitaciones intensivas, distribuidas en cinco módulos que abordan temáticas relacionadas a ecosistemas altoandinos, educación emocional, enfoques y metodologías pedagógicas.  Luego, realizamos un seguimiento a los docentes participantes, quienes deben preparar una clase demostrativa aplicando lo aprendido.  De esta manera, se genera un un cambio positivo en las prácticas docentes sobre educación ambiental. Además, ejecutamos proyectos ambientales escolares en algunas de las instituciones que cuentan con docentes participantes de Yakuaulas, para así reforzar el proceso educativo y vincular a madres y padres de familia, y a los estudiantes de estos maestros.

Guardianes del agua

Ejecutamos también el proyecto “Guardianes del Agua”, que busca generar un cambio de perspectiva positivo sobre la importancia de los ecosistemas páramo y bosque e incluye varios componentes. Uno de ellos es el artístico-ambiental, en el que se ejecutan las denominadas Caravanas del Arte.  Se trata de un proceso participativo que involucra a artistas, educadores, niños y niñas, así como a la comunidad educativa. Consiste en la realización de capacitaciones a un grupo de estudiantes para desarrollar conjuntamente una obra artística que se presentada en la institución educativa, al finalizar la capacitación.

Hemos evidenciado que los eventos artísticos realizados en las comunidades educativas son un espacio eficiente para la difusión de mensajes ambientales, por lo cual además invitamos a artistas profesionales a presentar obras que aborden el cuidado del agua y sus ecosistemas fuente. Caravanas de arte es una fiesta artística ambiental que involucra a toda la comunidad educativa.

Otro de los componentes del proyecto Guardianes del Agua es YakuGuaguas  que busca conectar emocionalmente a los participantes con el ecosistema páramo, brindarles una experiencia vivencial única y generar pensamiento crítico acerca de los impactos que amenazan a este ecosistema, las soluciones sostenibles y por tanto la importancia de conservarlo.

El tercer componente es Bosques y Agua, una capacitación en la que niños y niñas asisten a cinco recorridos experienciales en diferentes fincas para conocer sobre la importancia del bosque para el abastecimiento de agua, la biodiversidad, el suelo, los impactos y las soluciones sostenibles para el territorio.  Además, asesoramos técnicamente y capacitamos  a los actores locales de la Red de Bosques Escuela del Chocó Andino en pedagogía para que las experiencias sean más significativas, se logren los objetivos y que puedan alcanzar a un público más grande con sus habilidades mejoradas.  

Vinculamos a investigadores con tomadores de decisión

La Estación Científica Agua y Páramo (ECAP) es una iniciativa conjunta del Fondo para la Protección del Agua de Quito (FONAG) y la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (EPMAPS). A través de la ECAP promovemos y facilitamos el desarrollo de proyectos de investigación que permitan comprender mejor los procesos y la dinámica de los ecosistemas fuentes de agua.

Se trata de un espacio de colaboración que articula el trabajo del mundo académico con actores tomadores de decisiones, a través de la formulación de proyectos de investigación, el apoyo para llevarlos a cabo, su divulgación y aplicación de los resultados obtenidos.